«Volver al índice de glosario

Las personas con glaucoma pueden llegar a perder la visión si no se tratan correctamente e incluso llegar a la ceguera. De hecho, los niveles elevados de presión intraocular o PIO, son uno de los principales factores de riesgo que pueden resultar muy peligrosos para la salud visual, incluyendo también la hipertensión ocular. La esclerectomía profunda no perforante (EPNP) es una técnica quirúrgica que se utiliza para drenar el humor acuoso y reducir la presión intraocular.

Ésta es una técnica menos invasiva que la trabeculectomía para tratar el glaucoma. Si no sabes en qué consiste esta operación, no te preocupes. En Área Oftalmológica Avanzada te explicamos en qué consiste la esclerectomía profunda no perforante y cómo es el postoperatorio de esta intervención quirúrgica. ¡Sigue leyendo!

esclerectomía profunda no perforante

¿Qué es la esclerectomía profunda no perforante?

La EPNP es una técnica quirúrgica de drenaje que se emplea para reducir los altos niveles de presión intraocular que pueden causar glaucoma o hipertensión ocular. El objetivo de esta cirugía de glaucoma filtrante es drenar el humor acuoso, fluido que se encuentra en la cámara anterior del ojo, para disminuir la PIO y prevenir el daño al nervio óptico

La esclerectomía profunda no perforante, a diferencia de la trabeculectomía, no implica la apertura directa de la cámara anterior. Esta técnica permite drenar el humor acuoso a través de una pequeña incisión que se realiza en la esclera

El resultado final es muy similar al de la trabeculectomía, ya que el fluido circula de forma controlada. Como consecuencia de la EPNP, se forma una ampolla de drenaje tras cerrar las capas de tejido manipuladas. Por este motivo, prácticamente ha sustituido totalmente a la técnica quirúrgica de la trabeculectomía. 

El éxito de la esclerectomía profunda no perforante depende del estado de la ampolla de filtración, pues la cicatrización de la misma impediría el drenaje del humor acuosos y elevaría nuevamente los niveles de PIO. 

¿Para qué se realiza?

Como ya hemos dicho previamente, la esclerectomía profunda no perforante (EPNP) se realiza para tratar el glaucoma quirúrgicamente, en concreto, el de de ángulo abierto (no sirve para tratar el de ángulo cerrado). Solemos recomendar la realización de esta cirugía cuando las terapias conservadoras con láser SLT o gotas no funcionan para controlar la presión. 

Su principal función es la de facilitar la salida del humor acuoso hacia el espacio subconjuntival.  Una vez que se ha realizado la cirugía, se aplica una medicación para que la zona de drenaje no se cierre durante la cicatrización.

En otros casos, también se realiza un implante intraescleral reabsorbible, con el fin de mantener esa vía de drenaje abierta para que salga el humor acuoso de una mejor forma. 

¿Cuándo se aplica la EPNP?

La EPNP se lleva a cabo en pacientes que presentan una elevación de la presión intraocular, y que necesitan ser atendidos de inmediato para prevenir o tratar el glaucoma. Sin embargo, no todas las personas son candidatas a esta cirugía, ya que para realizar una EPNP es necesario que el paciente tenga el ángulo camerular o iridocorneal abierto y la conjuntiva en buen estado. 

Por lo tanto, la esclerectomía profunda no perforante no puede realizarse en pacientes cuyo ángulo iridocorneal esté cerrado. Por otro lado, no hay que tener alteraciones anatómicas en la zona donde se unen el iris y la esclera, ya que será la zona de drenaje.

Exámenes previos

Antes de realizar una EPNP, es necesario hacer una serie de exámenes al paciente para estudiar a fondo su estructura ocular y conocer el origen del aumento de la PIO. Cuando el aumento de la presión intraocular es causada por un glaucoma, resulta indispensable diagnosticar de qué tipo de glaucoma se trata y comprobar la presencia de otras enfermedades que puedan descartar esta cirugía como técnica de drenaje. 

Los exámenes médicos que se deben realizar a un paciente antes de una esclerectomía profunda no perforante son: 

Intervención

La EPNP facilita la salida del humor acuoso de la cámara anterior a través de la membrana trabéculo-descemética, ubicada entre la córnea y el ángulo iridocorneal, gracias a un fenómeno que se conoce como percolación. 

A medida que el humor acuoso empieza a drenar, los niveles de presión intraocular vuelven a la normalidad. Como mencionamos anteriormente, el éxito de esta intervención dependerá del estado de la ampolla de filtración que se forma al cerrar los tejidos. Para evitar que esta fístula se cierre, se utilizan medicamentos que inhiben la cicatrización. 

Antes

Después de realizar los exámenes médicos, se verá si el paciente es apto para una EPNP. Por norma general, se suele preferir antes que una trabeculectomía por todo lo anteriormente descrito. Además, en Área Oftalmológica Avanzada, también podemos combinar la cirugía de glaucoma con la cirugía de cataratas en caso de ser necesario. 

Durante

La esclerectomía profunda no perforante es un procedimiento que se lleva a cabo bajo anestesia local y sedación para que el paciente no sienta dolor. Durante la intervención, se realiza una disección de la conjuntiva y se crea un colgajo de tejido superficial de la esclera. 

Postoperatorio

Durante el postoperatorio de la esclerectomía profunda no perforante, el oftalmólogo realiza una serie de pruebas oftalmológicas para comprobar el éxito de la cirugía, tales como una gonioscopia y un OCT. Durante las primeras semanas después de operarse, el paciente puede presentar visión borrosa, que se irá normalizando a medida que avance el posoperatorio.

En paralelo, es importante mantener una evaluación constante de los niveles de PIO. Para tratar las molestias causadas por la intervención, el glaucomatólogo prescribirá medicamentos antiinflamatorios y corticoides.

Posibles riesgos

Esta operación es muy segura, ya que es mínimamente invasiva y más predecible que la trabeculectomía. No obstante, como cualquier intervención quirúrgica, no está exenta de algunos riesgos intrínsecos a un quirófano que, aunque excepcionales, pueden ocurrir. Entre ellos encontramos la posibilidad de infección y hemorragias, produciéndose un desprendimiento de coroides en los casos más graves. 

Finalmente, debemos mencionar que debes acudir rápidamente a tu oftalmólogo de confianza si tienes alguna complicación o crees que puedas necesitar una esclerotomía profunda no perforante u otra intervención ocular. Acudir rápidamente ayuda a reducir el impacto de la enfermedad, además de minimizar posibles riesgos y complicaciones.

En Área Oftalmológica Avanzada somos especialistas en todo tipo de intervenciones y tratamientos oculares. Si necesitas realizar un control oftalmológico o quieres más información, pide cita en nuestra página de contacto.

Resumen
¿En qué consiste la esclerectomía profunda no perforante?
Nombre del artículo
¿En qué consiste la esclerectomía profunda no perforante?
Descripción
La esclerectomía profunda no perforante (EPNP) es una técnica quirúrgica que se utiliza para drenar el humor acuoso y reducir la presión intraocular.
Autor
Nombre del editor
Área Oftalmológica Avanzada
Logotipo del editor
«Volver al índice de glosario