Síntomas de la conjuntivitis
La conjuntivitis es la inflamación de la conjuntiva pero, ¿cuales son sus síntomas? y ¿cómo podemos identificar una conjuntivitis?.
El síntoma más habitual y visible de una conjuntivitis es la dilatación de los vasos sanguíneos de la conjuntiva que le da esa característica tan habitual en todas las conjuntivitis, el ojo rojo. En función del tipo de conjuntivitis: vírica, bacteriana, alergica se presentaran distintos síntomas que nos permitirán identificar que estamos ante una conjuntivitis y saber el tipo de que se trata.
Síntomas de la conjuntivitis
La conjuntivitis es la inflamación de la conjuntiva pero, ¿cuales son sus síntomas? y ¿cómo podemos identificar una conjuntivitis?.
El síntoma más habitual y visible de una conjuntivitis es la dilatación de los vasos sanguíneos de la conjuntiva que le da esa característica tan habitual en todas las conjuntivitis, el ojo rojo. En función del tipo de conjuntivitis: vírica, bacteriana, alergica se presentaran distintos síntomas que nos permitirán identificar que estamos ante una conjuntivitis y saber el tipo de que se trata.
¿Qué es la conjuntivitis?
La conjuntivitis es una patología oftalmológica que ocurre cuando la conjuntiva de los ojos se inflama y causa enrojecimiento y lagrimeo constante, entre otros síntomas. La conjuntiva es una membrana delgada que cubre los párpados y la parte blanca del ojo, razón por la que al inflamarse hace posible que se noten más los vasos sanguíneos.
Es una de las enfermedades del ojo más comunes y puede presentarse tanto en bebés y niños como en adultos. La conjuntivitis puede ocurrir, entre otros motivos, debido a una alergia, infecciones y hasta irritación a causa de la luz ultravioleta, luz solar, resfriado y sarampión. Una conjuntivitis mal tratada puede generar complicaciones oculares como aquellos relacionados con el conducto lagrimal o torcedura del párpado. Por esta razón, es importante reconocer a tiempo los síntomas de la conjuntivitis y los tipos de esta enfermedad para actuar rápidamente y acudir al médico.
Tipos de conjuntivitis
- Conjuntivitis alérgica: esta causada por un agente externo, como el polvo, y puede estar acompañado de otras condiciones como el asma, la rinitis, la dermatitis y la urticaria.
- Conjuntivitis infecciosa: es aquella que se produce por la presencia de una bacteria o virus. A menudo, la causa más frecuente de la conjuntivitis infecciosa es un virus, debido a que se propaga más fácilmente.

Síntomas de la conjuntivitis
Esta enfermedad se caracteriza principalmente por provocar ojo rojo y producción excesiva de lágrima, pero también hay otros síntomas que acompañan esta condición, conócelos a continuación:
- Enrojecimiento e inflamación de la parte blanca de los ojos. Los vasos sanguíneos suelen distinguirse con facilidad.
- Producción excesiva de lágrimas.
- Secreción del ojo que puede ser de color blanco, amarillo o verde. Este síntoma es muy común en personas con conjuntivitis infecciosa.
- Los ojos suelen picar, arder y doler.
- Sensibilidad visual a la luz (fotosensibilidad), razón por la cual se recomienda el uso de lentes de sol.
- Sensación de tener granos de arena en los ojos, sobre todo al cerrar y abrir el párpado.
- Los ojos suelen llenarse de legañas, sobre todo en las pestañas y los párpados.
- Visión borrosa.
- Aspecto abultado y lechoso de la conjuntiva, propio de la quemosis conjuntival.
Cuando se presenta uno de los síntomas de la conjuntivitis es necesario visitar al oftalmólogo, el cual realizará una exploración de los ojos para determinar la causa de los síntomas presentes.
Si la conjuntivitis es infecciosa el especialista en salud ordenará la realización de pruebas sanguíneas para determinar el agente causante de la patología. Cuando la conjuntivitis es causada por un agente alérgeno se suele diagnosticar junto con otras patologías.
¿Cómo se contagia la conjuntivitis?
La conjuntivitis infecciosa es una enfermedad que suele propagarse fácilmente de una persona a otra, pues solo basta con tener un mínimo contacto con las bacterias para contraer la enfermedad. Es decir, el uso de gafas de una persona infectada o tocar los ojos de una persona con conjuntivitis pueden ser vías de contagio.
La conjuntivitis alérgica no es contagiosa, a menos de que esté acompañada de otra infección. Por lo general, el humo, los ácaros del polvo, la pelusa de perro y la contaminación de la ciudad son agentes externos que suelen provocar esta patología.
Evitar el contagio de una conjuntivitis es posible si se llevan a cabo las siguientes recomendaciones:
- Lavarse las manos varias veces al día con jabón antibacterial.
- No tocarse ni frotarse los ojos con las manos sucias, mucho menos estando cerca de una persona infectada.
- No preste ni comparta el uso de gafas o lentillas. Esta herramienta debe ser de uso exclusivamente personal para prevenir no solo la conjuntivitis, sino otras patologías oftalmológicas.
- Limpie y desinfecte al menos una vez al día sus gafas. Asimismo, guárdelas en un estuche adecuado y limpio.
- No se debe prestar el maquillaje ni usar maquillaje de otras personas. Cosméticos como la máscara de pestañas, sombras o delineador de ojos pueden transmitir la enfermedad.
Cuánto dura la enfermedad
La duración de la conjuntivitis varía según la causa de la condición y cuan tan avanzada está. Por lo general, cuando los síntomas se tratan a tiempo la conjuntivitis infecciosa puede tardar en curarse entre 7 y 10 días después de comenzar el tratamiento y seguir los consejos de prevención. Sin embargo, en algunos casos la conjuntivitis puede llegar a durar meses y años, lo cual suele ocurrir cuando el párpado se ha torcido o el lagrimal se ha visto muy afectado.
Cuando la conjuntivitis es infecciosa a causa de un virus puede durar hasta 5 días, pero si la causa de la infección es una bacteria la recuperación puede tardarse un poco más mientras el antibiótico hace efecto en el organismo. Cuando la conjuntivitis es alérgica, será preciso atender la causa primaria para comenzar a notar cambios favorables en el ojo y la visión, lo cual puede tardar días o meses.
Tratamiento de la conjuntivitis
Igual que su duración, el tratamiento de la conjuntivitis dependerá de su causa. La conjuntivitis alérgica suele mejorar a través de consumo de antialérgicos y, muy importante, evitando el contacto con los agentes externos, como el polvo, que hayan podido causar el desarrollo de esta condición. Asimismo, cuando la conjuntivitis es causada por una alergia suele calmarse con la aplicación de compresas frías.
El tratamiento de la conjuntivitis infecciosa causada por bacterias consiste en la ingesta de medicamentos antibióticos para fortalecer el sistema inmune y destruir los microorganismos. Cuando la conjuntivitis es viral desaparece por sí sola y no hace falta el consumo de antibióticos. El uso de gotas oculares para la conjuntivitids puede ayudar a calmar los síntomas. Las siguientes recomendaciones son útiles para ayudar a mejorar las molestias causadas por la conjuntivitis de cualquier tipo:
- Aplicar compresas tibias en los ojos.
- Evitar la exposición a todo tipo de humo, viento o aire acondicionados.
- Evitar el uso de cualquier medicamento o sustancia que pueda irritar aún más los ojos.
- Limpiar los ojos y pestañas varias veces al día.

