La cirugía refractiva corneal (FemtoLASIK, LASIK, PRK) es el procedimiento más popular para corregir los errores refractivos más comunes. como la miopía, hipermetropía y/o el astigmatismo. Se basa en la modificación de la curvatura corneal mediante el láser excímer, para corregir la graduación de manera estable en el tiempo.

Requisitos generales
Para lograrlo es indispensable reunir las condiciones de ser mayor de 18 años y que la graduación sea estable y no haya aumentado en el último año. Sin embargo, la seguridad y la predictibilidad dependerán no solo de estas variables sino también de características propias de la córnea como su forma y su propiedad viscoelástica.
En los inicios de la cirugía refractiva, la córnea se consideraba como “un trozo de plástico”, la cual se podía moldear de forma precisa con el láser. Actualmente se sabe que esta idea es errónea, ya que después del tratamiento la córnea puede seguir sufriendo modificaciones debido a procesos de cicatrización y a su biomecánica, pudiendo afectar el resultado. Teniendo en cuenta estos cambios, es muy importante realizar una correcta exploración preoperatoria y conocer el estado biomecánico de la córnea, ya que no todos los pacientes son candidatos para la cirugía refractiva corneal.
Pruebas para saber si me puedo operar
Las principales pruebas que realizamos en Área Oftalmológica Avanzada para el estudio preoperatorio, que nos ayudarán a determinar la biomecánica de la córnea y a elegir el procedimiento quirúrgico más adecuado entre la intervención LASIK, PRK o lente intraocular ICL, son las siguientes:
- Topografía (Pentacam): Nos da información acerca de la curvatura, elevación y grosor de la córnea. Permite además detectar de forma precoz anomalías o patologías corneales que podrían contraindicar la cirugía corneal.
- ORA (Ocular Response Analyzer): Nos permite conocer el estado biomecánico de la córnea (resistencia y elasticidad), por lo que podemos predecir la respuesta y estabilidad de la córnea a la cirugía refractiva. También es de gran utilidad para hacer un seguimiento del paciente intervenido y calcular la presión intraocular de forma más precisa.
- Aberrometría (iTrace): Nos permite el análisis cuantitativo y cualitativo de las aberraciones ópticas. Estas se definen como la distorsión de la luz respecto a su trayectoria ideal dentro del ojo, inherentes a sus imperfecciones ópticas. Esta información es de gran utilidad para valorar la calidad de visión y para planificar de forma eficaz su corrección quirúrgica.
La combinación de la información proporcionada por estas pruebas junto a una completa valoración preoperatoria nos ayudarán a distinguir una córnea normal o patológica y así decidir de forma segura la técnica más adecuada para cada caso.
En el caso de que no se pueda aplicar la cirugía refractiva corneal debido a una biomecánica corneal alterada, graduación elevada o espesor corneal muy fino se puede valorar la opción de corregir el problema mediante una lente intraocular tipo ICL. Consúltanos y descubre todas las alterativas para corregir los problemas de visión que podemos ofrecerte en Área Oftalmológica Avanzada.

