Hasta hace bien poco el tratamiento del Síndrome del Ojo Seco (SOS) se limitaba a aplicar lágrimas artificiales, calor y limpieza de los párpados. Actualmente se realiza la exfoliación del borde libre de los párpados, una nueva técnica indolora con efectos inmediatos.
Combatir el SOS con un nuevo tratamiento indoloro y efectos inmediatos ya es una realidad. La exfoliación palpebral o blefarolimpieza, es un masaje ocular que trata de eliminar los depósitos de la suciedad ambiental, los residuos bacterianos y la biopelícula (biofilm), de los párpados y, así, acabar con los agentes inflamatorios que causan irritación y contribuyen a la génesis del ojo seco.
Frente al remedio que existía hasta ahora (lágrimas artificiales y lavados de agua con jabón u otros baños oculares), el masaje ocular representa un avance importante debido a su eficacia y sencillez. Tan sólo hay que aplicar una gota anestésica en el ojo antes del tratamiento –para conseguir una mayor comodidad del paciente durante el proceso–, y mediante un rotor con polvo de diamante, se elimina la capa anómala que cubre el borde libre de los párpados. Los resultados suelen llegar a ser inmediatos, dependiendo, eso sí, de la cantidad bacteriológica que se encuentre en la base de las pestañas (borde libre palpebral).
La blefaritis es la inflamación de los párpados y viene causada por la producción excesiva de bacterias en la base de las pestañas. Las bacterias producen una película que acumula residuos y ello conlleva la inflamación de esta zona, donde se abren las glándulas que segregan la grasa y nutrientes que necesita la lágrima. Este tratamiento consigue eliminar esta biopelícula, y aunque no es a perpetuidad, dado que esta enfermedad es crónica, sí que se consigue un resultado óptimo repitiendo el proceso cada 4 – 6 meses al principio y luego una vez al año.

