Traumatismos, defectos congénitos y algunas enfermedades pueden provocar la pérdida total o parcial del globo ocular. En estos casos lo más recomendable es optar por una prótesis ocular que sirva de reemplazo y ayude a mejorar el aspecto del paciente.
Si bien las personas pueden llevar una vida normal con la visión de un solo ojo, la pérdida del globo ocular resulta una realidad muy difícil de asimilar y trae consecuencias psicológicas, estéticas y sociales.
En Área Oftalmológica Avanzada te explicamos para qué sirven las prótesis oculares y qué tipos existen.

¿Qué es una prótesis ocular?
Una prótesis ocular es un reemplazo artificial del ojo que se utiliza para compensar el problema estético, psicológico y social que supone la pérdida del globo ocular.
Cuando se pierde un ojo existen dos opciones: tapar la cavidad con un parche ocular o colocar una prótesis ocular. La reconstrucción de la cavidad orbitaria mediante una cirugía oculoplástica y la adaptación de prótesis oculares, ofrecen al paciente una excelente recuperación estética.
La reconstrucción plástica del ojo con una prótesis ocular tiene como única función mejorar la calidad de vida del paciente.
Tipos
Existen tres tipos de prótesis oculares:
- Prótesis ocular doble o simple: se fabrican a partir de un iris pintado a mano. Se suelen adaptar en los procedimientos de enucleación del ojo y su espesor depende del tamaño de la cavidad orbitaria del paciente.
- Conchas esclerales o cascarillas cosméticas: su espesor es más delgado que el de las prótesis dobles o simples. Estas se pintan sobre el mismo material y se recomiendan a pacientes con ojo retraído. También son una opción cuando la lente de contacto no se puede adaptar correctamente.
- Conformadores: son prótesis blancas y transparentes que sirven para rellenar la cavidad mientras se coloca la prótesis definitiva.
¿Cómo se aplican las prótesis oculares?
El procedimiento quirúrgico para aplicar una prótesis ocular puede variar según el estado del paciente. Las técnicas más utilizadas son las siguientes:
- Evisceración o Enucleación: la enucleación consiste en vaciar por completo el globo ocular. Para aplicar la prótesis, el oftalmólogo adapta el implante a los músculos extraoculares para que la prótesis imite el movimiento del ojo. Durante la evisceración se vacía el globo ocular, pero se conservan los músculos y la esclera.
- Injertos dermo-grasos: se usa cuando hay alteraciones en los implantes orbitarios, contracción del socket, deformación del surco superior. Esta técnica se puede combinar con una enucleación.
- Reconstrucción de fondos de saco: permite reconstruir la parte interna del párpado. Gracias a este procedimiento, se consigue un mejor movimiento del globo ocular y se cierran mejor los párpados.
Limpieza y mantenimiento de tu prótesis
El cuidado y la limpieza de una prótesis ocular es muy importante para preservar la misma en buen estado. Algunos cuidados tras un implante de prótesis en el ojo son:
- No retirar la prótesis durante varios días continuos.
- Limpiar la prótesis con líquidos para lentes permeables al gas.
- Si el oftalmólogo lo recomienda, se debe retirar diariamente la prótesis para limpiar el ojo.
- En caso de secreciones y legañas se debe mantener una limpieza frecuente de la estructura ocular.
- Usar gafas protectoras al hacer deporte.
- Usar gafas de sol para prevenir la decoloración del material de la prótesis.
- Usar gafas para nadar en la playa o en la piscina.
En Área Oftalmológica Avanzada somos expertos en la implantación de prótesis oculares. Si necesitas una limpieza o mantenimiento en tu prótesis ocular, no dudes en pedir cita. ¡Te atenderemos de la mejor manera!

