Estrabismo en adultos
El estrabismo es una alteración de la visión binocular que se produce cuando los ojos no están alineados en la misma dirección y que, como consecuencia, no pueden ver un objeto al mismo tiempo.
El estrabismo en adultos, en la mayoría de los casos, es producto de un estrabismo infantil no tratado y no atendido correctamente, sin embargo, también puede ocurrir por problemas neurológicos y cambios oculares asociados a la edad como las cataratas.
Cuando la diferencia de alineación entre ambos ojos es muy grande, el estrabismo es muy evidente y puede dificultar las relaciones interpersonales del paciente, muy especialmente en adultos.
Estrabismo en adultos
El estrabismo es una alteración de la visión binocular que se produce cuando los ojos no están alineados en la misma dirección y que, como consecuencia, no pueden ver un objeto al mismo tiempo.
El estrabismo en adultos, en la mayoría de los casos, es producto de un estrabismo infantil no tratado y no atendido correctamente, sin embargo, también puede ocurrir por problemas neurológicos y cambios oculares asociados a la edad como las cataratas.
Cuando la diferencia de alineación entre ambos ojos es muy grande, el estrabismo es muy evidente y puede dificultar las relaciones interpersonales del paciente, muy especialmente en adultos.
¿Qué es el estrabismo en adultos?
El estrabismo en adultos es un problema ocular que se empieza a manifestar, generalmente, durante la infancia. Se trata de una alteración de la visión binocular que se produce cuando los ojos no tienen la misma alineación visual y, por lo tanto, al mirar un mismo objeto, enfocan en direcciones distintas.
El estrabismo en adultos no es tan común. De hecho, 4 de cada 100 adultos padece este trastorno y casi siempre aparece por no haberse tratado durante la niñez.
En algunos casos, dependiendo de la salud ocular del paciente, el estrabismo en adultos es una patología que puede ser constante o intermitente, llegando incluso a dificultar la realización de tareas cotidianas en el trabajo y en la práctica deportiva.
Causas
La principal causa del estrabismo en adultos es un estrabismo infantil no tratado o mal tratado durante la infancia. y suele estar relacionado con una diferencia de graduación muy significativa entre ambos ojos, lo que se conoce en oftalmología como ambliopía u ojo vago. y, cuando se relaciona con el estrabismo se conoce como ambliopía estrábica.
Las personas con ojo vago que no tienen estrabismo en el presente pueden desarrollarlo en el futuro. Esto ocurre porque cuando no hay una buena visión, el cerebro descarta automáticamente la imagen incorrecta y altera la visión binocular, pudiendo causar la desviación del ojo.
Asimismo, tanto el estrabismo en adultos como el ojo vago pueden tratarse con terapias desde una edad muy temprana. Eso sí, es importante corregirlo a tiempo para que no provoquen limitaciones ni se conviertan en un problema mayor durante la edad adulta.
Otras causas que pueden provocar estrabismo en adultos son:
- Cambios de refracción en la adultez, que pueden aparecer por cataratas o por cirugía ocular.
- Enfermedades neurológicas que comprometen la salud de los nervios que envían las señales a los músculos oculares.
- Existe el estrabismo asociado exclusivamente a la enfermedad tiroidea.
- Alteraciones en la órbita ocular, que es la cavidad donde se sitúa el globo ocular. Esto puede producirse por cualquier tipo de traumatismo.
Síntomas del estrabismo en adultos
¿Cómo se manifiesta el estrabismo? El principal síntoma del estrabismo en adultos es la desviación de uno o ambos ojos a una dirección determinada.
Cuando los ojos no tienen la misma alineación, el síntoma más evidente es que uno o ambos se desvían hacia adentro, hacia afuera, hacia arriba o hacia abajo.
Sin embargo, además de ser un problema visual, también disminuye la autoestima de los pacientes adultos con estrabismo.
Cabe destacar que, cuando esta patología es reciente, causa visión doble de las imágenes de forma constante o intermitente, cansancio y fatiga ocular.
Del mismo modo, para mirar de forma más cómoda, los pacientes tienden a girar la cabeza hacia un lado, intentando generar su propia compensación visual.
Operación de estrabismo en adultos
Dependiendo del grado de desviación que presenta el paciente, se pueden evaluar diferentes opciones de tratamiento, tanto para el estrabismo como para la ambliopía.
La cirugía de estrabismo en adultos es una intervención reconstructiva que se puede realizar en la mayoría de pacientes y a cualquier edad.
Gracias a los modernos sistemas de control quirúrgico y a la constante evolución de las técnicas de cirugía, la operación de estrabismo en adultos es un tratamiento seguro donde obtenemos unos resultados muy satisfactorios.
¿En qué consiste?
La cirugía del estrabismo se puede llevar a cabo a través de distintas técnicas, y el procedimiento a elegir dependerá del estado de salud ocular y estrabismo de cada paciente.
La operación del estrabismo tienen como objetivo reforzar o debilitar los músculos del ojo para mejorar su posición y provocar un cambio en sus movimientos. Cuando los músculos comienzan a moverse, se consigue una mejoría notoria.
En casos de estrabismo vertical en adultos, puede ser necesaria la combinación de varias técnicas de cirugía, ya que en este tipo de estrabismo interviene una mayor variedad de músculos oculares.
En todo caso, los distintos procedimientos para operar el estrabismo ofrecen resultados excelentes y mejoran considerablemente el aspecto físico y la calidad de vida del paciente.
¿La operación es la solución al estrabismo en adultos?
Durante la niñez, el estrabismo se puede revertir a mediante terapia visual que ayude a fortalecer los músculos del ojo. Sin embargo, cuando el paciente es adulto es muy difícil de conseguir.
Cuando el estrabismo en adultos es una limitación importante, los oftalmólogos recomendamos operar para mejorar la apariencia física del paciente y conseguir una mejora significativa en la percepción visual.
Recuperación de la operación de estrabismo en adultos
La recuperación después de una operación de estrabismo puede variar según la técnica que se haya realizado y las molestias del paciente.
Por lo general, se necesita que el paciente guarde reposo durante al menos una semana, pero puede llegar a prolongarse hasta 15 días.
Después de la cirugía, la mayoría de los pacientes pueden comenzar a agachar la cabeza, dormir, leer y ver la televisión. Todo ello sin hacer grandes esfuerzos.
Es importante seguir al pie de la letra las instrucciones médicas, usar lágrimas artificiales y tomar debidamente los medicamento antiinflamatorios en caso de presentar una hinchazón postcirugía.
