Astenopia o fatiga visual
Si alguna vez te has sentido con dolor de cabeza, ardor en los ojos y, al mismo tiempo, te encuentras forzando la vista para ver bien de cerca; puede que hayas experimentado un episodio de astenopia o, como se dice comúnmente, fatiga visual.
Esta afección es más común de lo que imaginas y tiene su origen en el músculo ciliar del ojo.
La principal causa de la fatiga visual es el sobreesfuerzo que realizan algunas personas para ver bien de cerca, y que termina desencadenando una fatiga importante en el músculo ciliar, causando visión borrosa y otros síntomas molestos.
Astenopia o fatiga visual
Si alguna vez te has sentido con dolor de cabeza, ardor en los ojos y, al mismo tiempo, te encuentras forzando la vista para ver bien de cerca; puede que hayas experimentado un episodio de astenopia o, como se dice comúnmente, fatiga visual.
Esta afección es más común de lo que imaginas y tiene su origen en el músculo ciliar del ojo.
La principal causa de la fatiga visual es el sobreesfuerzo que realizan algunas personas para ver bien de cerca, y que termina desencadenando una fatiga importante en el músculo ciliar, causando visión borrosa y otros síntomas molestos.
¿Qué es la asteniopia o fatiga visual?
La astenopia, conocida coloquialmente como fatiga visual, es una reacción del ojo ante el sobreesfuerzo del músculo ciliar durante un periodo de tiempo prolongado.
En la mayoría de casos, la astenopia se presenta en las personas que realizan un esfuerzo excesivo para ver correctamente de cerca, pues dicho esfuerzo ocular genera fatiga muscular y una serie de síntomas muy desagradables.
El músculo ciliar es la estructura afectada por el sobreesfuerzo de la vista. Este músculo se halla en la parte interna del ojo y se encarga de presionar al cristalino para que éste pueda enfocar de forma correcta las imágenes.
Cuando el músculo ciliar se fatiga no puede ejercer bien su función y la persona empieza a presentar visión borrosa.
Causas de la fatiga ocular
La fatiga visual se produce cuando el músculo ciliar está presionando de forma prolongada el cristalino, generalmente porque la persona presenta dificultad para ver correctamente de cerca.
Sin embargo, existen otros factores y afecciones que pueden originar fatiga ocular.
Conozcamos cuáles son:

- Insomnio.
- Lentes de contacto.
- Actividades que estimulan de forma prolongada un esfuerzo visual, tales como trabajar todo el día frente al ordenador, usar de forma excesiva el móvil, leer durante mucho tiempo y el uso de cualquier dispositivo con pantalla digital.
- La cirugía refractiva.
- Las actividades que estimulan la visión lejana también son capaces de producir fatiga ocular. Las más frecuentes son conducir y ver la televisión.
- Los cambios de enfoque constantes de visión lejana a próxima o viceversa.
- Permanecer durante tiempo prolongado en ambientes poco iluminados, mal iluminados o excesivamente iluminados.
- Sequedad ocular en su fase inicial.
- El consumo de algunos medicamentos diuréticos, somníferos, antihistamínicos, antibióticos, antihipertensivos, hormonas, etc.
- Defectos refractivos que no se han atendido o no han sido corregidos de forma correcta: miopía, hipermetropía, astigmatismo y presbicia.
- Problemas en la visión binocular o en el poder acomodativo del cristalino.
- Factores ambientales como humedad, frío, calor excesivo, acaros, humo de tabaco, polen, etc.
- Alteraciones oculares como el ectropión, entropión, miocimia, blefaroespasmo, triquiasis y obstrucción de las vías lagrimales.
Síntomas
El principal síntoma que produce la fatiga visual es la visión borrosa, debido a que el cristalino tiene dificultad para enfocar debidamente las imágenes y ve comprometida su función.
Además de la visión distorsionada, un paciente con astenopia puede presentar:
- Comezón en el ojo y sensación de arenilla o de tener un cuerpo extraño en el ojo.
- Sensación de calor en los ojos, sequedad y lagrimeo excesivo.
- Cefalea y congestión nasal. El dolor de cabeza puede afectar a otras zonas.
- Dolor en el cuello, espalda y hombros.
- Ojos enrojecidos y párpados inflamados.
- Dificultad para enfocar y visión doble.
- Sensibilidad a la luz y dificultad para concentrarse.
- Parpadeo espasmódico y dificultad para mantener los ojos abiertos.
- Sensación de sueño.

¿Cómo prevenir la astenopia?
La fatiga ocular o astenopia acomodativa no es una enfermedad, es una condición que en la mayoría de los casos podemos prevenir si mantenemos un cuidado adecuado de nuestra salud visual si abandonamos algunos malos hábitos y adoptamos nuevas costumbres.
El uso de la luz indirecta cuando estamos utilizando la vista para, por ejemplo, leer, es de gran ayuda para evitar que la vista se esfuerce de forma excesiva.
También es importante ser consciente de la distancia que se mantiene con el ordenador. ¿Es la correcta? ¿Estás viendo la pantalla muy de cerca o muy de lejos?
Ten en cuenta que, si trabajas frente a una pantalla, es indispensable que realices descansos visuales cada hora aproximadamente.
Otra alternativa muy efectiva para prevenir la fatiga visual es realizar ejercicios oculares de relajación que ayuden a combatir el cansancio de la vista y, por lo tanto, prevenir una astenopia.
El ejercicio consiste en mover los ojos lentamente en el sentido de las agujas del reloj, y al terminar una vuelta repetir en el sentido contrario.
Si esta opción no es de tu agrado siempre podrás refrescar tus ojos con agua fría para aliviar la vista y el cansancio inmediatamente.
Por último, prueba a abrir y cerrar los ojos con fuerza 5 veces y repetir dicha secuencia 8 veces. Al abrir y cerrar los ojos rápidamente conseguimos estimular la relajación del músculo ciliar.

